miércoles, 14 de junio de 2017

¿Cómo memorizar Las Escrituras?

Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. (Josue 1:8).


Un día cuando Martín Lutero era estudiante, estaba en la biblioteca de su universidad buscando algunos libros, cuando tropezó con un extraño volumen que le llamó mucho la atención. Era un ejemplar de la Biblia en Latín. Grande fue su asombro, porque siempre había creído que los fragmentos de la Biblia que se leen en los cultos de la iglesia a la cual él pertenecía, eran la Palabra de Dios completa. Su interés por este libro fue tan grande, que dijo que deseaba por sobre todas las riquezas, una Biblia. Poco después entró en un monasterio de frailes agustinos y el Vicario General le regaló una Biblia que estudió con gran cuidado. Este estudio le facilitó el camino para su propia iluminación espiritual y para el gran trabajo de reformación que él emprendió. Esto demuestra el efecto que produce la lectura de la palabra de Dios en el corazón de los hombres.


Memorizar las Escrituras es una de las disciplinas cristianas mas ignoradas. Muchos cristianos creen que la memorización de las Escrituras es simplemente muy difícil. Esto no es verdad. Todos pueden aprender a memorizar la Escritura. Las siguientes sugerencias te pueden ayudar:


- Memoriza pequeñas porciones.


- Comienza con pequeñas porciones de la Escritura.


- No te preocupes; es una disciplina de toda la vida.


- Memoriza los versículos de tu interés. Memoriza los versículos que te interesan o te pueden ayudar con tu crecimiento espiritual. Si tienes un problema con la paciencia entonces memoriza versículos que hablen sobre las virtudes y la bendición de la paciencia. Si quieres ser un mejor testigo, entonces memoriza versículos sobre la salvación


- Memoriza sistemáticamente.  Memoriza versículos que traten con un tema específico. Cuando hayas dominado esos versículos, elije otro tema y comienza de Nuevo.


- Memoriza en las oportunidades. Lleva tus versículos a memorizar contigo en pequeñas tarjetas. Trabaja en la memorización de la Biblia cuando estés manejando hacia el trabajo, estando conectado(a), limpiando la casa, etc.


- Revisa periódicamente los versículos de la Escritura que ya has memorizado, de modo que ellos siempre estén firmemente arraizados en tu corazón y mente.
Soli Deo Gloria